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Zamora ante el virus: turismo de sol… y subsuelo

La asociación cultural “Todo esto era campo” impulsa actividades relacionadas con la geología, entre las que destacan visitas guiadas a Peña Mira y los Infiernos de Almaraz.

En un verano tan extraño, el sector turístico busca alternativas que ofrecer ante la extrema reducción de posibilidades. En este panorama tan poco halagüeño asoma la cabeza “Todo esto era campo”, una asociación cultural que busca promocionar el geoturismo como una opción atractiva de ocio tanto para autóctonos como para foráneos.

Desde el mes de marzo, la pandemia que afecta al turismo, entre otros sectores, marcó negativamente este sector concreto. A pesar de ello, la actividad de interior se ha visto reforzada ante la caída del ocio en las costas.

El proyecto dispuesto contará con la colaboración de la Diputación de Zamora y constituye una alternativa interesante ante la suspensión de tantas actividades de ocio debido a la pandemia. Las visitas a Peña Mira y a los Infiernos de Almaraz, principal encanto del plan, tendrán lugar los días 15 y 16 de agosto. Ambas se desarrollarán lejos de los núcleos de población y en grupos reducidos, con el fin de ajustarse a las medidas de seguridad pertinentes.

Los dos rincones escogidos, pertenecientes a la Sierra de la Culebra y al inicio de los Arribes del Duero respectivamente, son dos claros exponentes de la riqueza geológica de la provincia. Manuel Iglesias, geólogo, divulgador y líder de la organización, asegura que “ambas rutas ya estaban programadas y nos apetece mucho llevarlas a cabo”. A pesar de la ilusión, reconoce que la pandemia les ha puesto en dificultades. “El distanciamiento social hace que tengamos que reducir los grupos a veinte personas”, manifiesta.

Con sus 1.241 metros de altura, Peña Mira se alza como el punto más elevado de la Sierra de la Culebra. La belleza de su paisaje la convierte en uno de los espacios más adecuados para hacer senderismo. Mediante recorridos de aproximadamente una hora y media, TEEC ofrece a los amantes de la naturaleza la posibilidad de conocer uno de los puntos clave de Aliste, desde donde se pueden divisar varios espacios, como las comarcas de Sanabria y La Carballeda o la vecina portuguesa Bragança.

El éxito del itinerario en el Geododía de 2019 llevó a la organización a repetirla este año. “El Geododía es el día en el que todas las provincias del país salen a enseñar geología. El año pasado, nosotros escogimos Peña Mira para esta fecha, y el resultado no pudo ser mejor. Tuvimos una afluencia de más de cien personas e incluso nos vimos obligados a dejar a gente fuera”.

Tierra del Pan acoge los célebres Infiernos de Almaraz, un paraje ribereño contiguo al río Duero caracterizado por la presencia de peñascos que muestran la abundancia sedimentaria de la zona. Según la tradición local, esta riqueza geológica se debe a la fuerza del infierno, concepto que da nombre a este atractivo rincón. Este espacio había sido elegido como sede del Geododía 2020 en la provincia en el mes de mayo. Sin embargo, la crisis del coronavirus hizo imposible llevarla a cabo. “Como no pudimos realizarla en su día, queremos hacerla ahora, aunque sea en otras circunstancias. Es una ruta muy bien diseñada. La geología de los meandros de los Infiernos de Almaraz es muy interesante”, manifiesta Iglesias. El geólogo no descarta celebrar más eventos si la situación lo permite. “Tenemos en mente realizar actividades en Sanabria. Una de ellas sería recorrer el Lago en canoa”, afirma.

Además de las visitas nombradas, el proyecto incluye otra serie de actividades. Entre ellas destaca EducaTEEC, un programa divulgativo que trata de acercar la materia de Ciencia de la Tierra a los centros educativos a través de la celebración de talleres y pequeñas rutas. Iglesias reconoce que la propuesta ya está en marcha. “El objetivo es enseñar geología a los jóvenes, que parece que la tienen olvidada”, asevera. La asociación zamorana aboga también por la lucha contra la despoblación a través de charlas y talleres que tratan la riqueza geológica de las zonas afectadas por este problema.

Además, el grupo ofrece dos trayectos por Zamora capital: la Ruta Geomonumental y la Ruta por el Cenozoico. La primera cuenta la historia de la piedra desde su formación hace millones de años y repasa su papel en la historia de Zamora como roca ornamental y constructiva. Además, revela los secretos que ocultan las rocas y que muestran el pasado más remoto de la ciudad. La segunda, por su parte, recorre el bosque de Valorio en busca de los elementos característicos de la morfología fluvial. En ella se analizan ejemplos de modelado, estructuras sedimentarias curiosas, canteras y paisajes en un entorno excepcional. El geoturismo aparece este mes de agosto como una de las alternativas más atractivas en el panorama turístico ante las limitaciones provocadas por la pandemia. La asociación cultural Todo esto era campo es el principal adalid de esta rama del ocio de interior. Los acontecimientos sucedidos este año provocaron que planes de recreo alternativos hayan aparecido ante la suspensión de muchas de las actividades clásicas del periodo estival.