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Museo de Ribadelago: « por una vez veo que puede ser verdad »

La Diputación financiará la obra y Ayuntamiento de Galende la adjudicará y controlará

El vicepresidente segundo de la Diputación de Zamora, Jesús María Prada Saavedra, ratificó ayer la financiación íntegra por parte de la Diputación de las obras de museo de la Memoria de Ribadelago. El político visitó ayer el edificio del antiguo Ayuntamiento de Ribadelago acompañado por el diputado comarcal, Ramiro Silva Monterrubio; el alcalde de GalendeJosé Manuel Prieto Ramos, la teniente de alcalde, Carmen Velasco y el representante de Alcaldía de Ribadelago, Miguel Fernández.

Jesús Prada visitó previamente las instalaciones de Industrias Cárnicas Pascualín, en la localidad de Tábara, una de las empresas que ha solicitado la Marca de la Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica, etiquetando con ese sello los productos con origen en su territorio, con lo que se inicia el proceso de estudio y validación de la solicitud.

La inversión en la reforma del edificio para albergar el Museo de la Memoria de Ribadelago asciende a 288.000 euros con cargo al remanente de la Diputación Provincial de 2021. La reunión con el alcalde de Galende tenía la finalidad de tratar “los asuntos jurídicos y técnicos de esa colaboración”.

La institución provincial suscribirá un convenio con la Alcaldía, quien gestionará la adjudicación y ejecución del proyecto redactado por Francisco Somoza. Prada señaló que “es la materialización de un anhelo, de un deseo de muchos sanabreses y muchos zamoranos y sobre todo de los vecinos de Ribadelago de ver ese museo de la Memoria, ese lugar de homenaje a esas 144 personas”.

La subvención será nominativa para que el Ayuntamiento no tenga problemas de financiación. Para el equipo de Gobierno de la Diputación “es un gasto y es también una inversión en materia turística en la comarca de Sanabria, además del acto de homenaje”.

El Ayuntamiento de Galende ha costeado el proyecto y el alcalde mostró su disposición a comenzar el proceso de adjudicación: “Por una vez en la vida veo que puede ser verdad”, afirmó el regidor, quien manifestó que “no volveremos a entrar aquí hasta que no esté terminado”. Un recorrido por el edificio dejó constancia del deterioro por humedades de las salas de la segunda planta. Para el responsable municipal el hecho de que la inversión “está contemplada en los remanente, ya puedo decir que es en serio”.

Prieto reconocía que “es una pena que se dejara caer este edificio y se hiciera donde se pensaba hacer”. Un capítulo importante de la reforma es precisamente la intervención en la cubierta, fuente de humedades y problemas. La accesibilidad también está contemplada con un ascensor.

El Ayuntamiento de Galende ha devuelto la ayuda de unos 45.000 euros, concedida por la Junta de Castilla y León, al no ejecutarse en 2020 como consecuncia de la emergencia sanitaria. Una vez que la obra del edificio esté completa se solicitará la participación de la Junta en la musealización.

En su visita a Industrias Cárnicas Pascualín, en Tábara, señaló que la empresa ha solicitado el uso de la marca Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica tanto para la carnicería como para la trasformación de productos que tienen su origen en la Resera de la Sierra de la Culebra. Con esta visita “iniciamos un procedimiento administrativo de comprobación”. Prada recalcó que la marca “es un plus para los productos del territorio, y por lo tanto, animamos a todos los productores y a todos los negocios de esos 47 municipios de la provincia a que soliciten el uso de la marca e inicien el procedimiento para etiquetar sus productos”.

En cuanto al ritmo de incorporación a la marca “cuando entró en marcha la Reserva hubo bastantes negocios, sobre todo alojamientos rurales, y ha sido más lento el tema de productores”. Con la incorporación de una coordinadora de la Reserva está en marcha una línea de información de cómo etiquetar y las condiciones, y cada vez hay más solicitudes de productores.

El representante de la empresa, José Manuel Ballesteros, detalló la calidad del producto, en particular el lechazo, que se genera en la zona de la Sierra de la Culebra. Detalló el proceso de cría, trasformación y la comercialización, con envasado al vacío al que se incorpora una nueva línea de “quinta gama” ya elaborado y listo para el consumo. José Manuel Ballesteros explicó el problema que han sufrido los productores de lechazo con la crisis sanitaria de coronavirus, y cómo han tenido que innovar y buscar nuevos mercados para colocar la producción.

Fuente: La opinión de Zamora 21/01/2021